domingo, 16 de diciembre de 2018

Cuento 35 del Conde Lucanor. (ambientado en tiempos actuales). Álvaro Raboso Amorín

Lo que sucedió a un mancebo que casó con una muchacha muy rebelde
Otra vez hablaba el Conde Lucanor con Patronio, su consejero, y le decía:
               Hola, Patronio, ¿que tal?. Ayer un amigo mío me contó que se quiere casar con una chica nueva que ha conocido. Al parecer la chica es muy culta y sus padres tienen mucho dinero, una chica mimada en pocas palabras. Lo malo es que algunas personas cercanas a ella dicen que es muy  violenta y colérica. ¿Cómo debería aconsejarle?

             Patronio le dijo que en una ciudad vivían un padre y su hijo, desgraciadamente no tenían mucho dinero, su padre estaba estaba en el  paro  y divorciado. El era bastante listo, tranquilo, sosegado y tenía muchos ideas, quería ser emprendedor, pero claro necesita dinero para comenzar.

            Había oído que en el barrio de al lado vivía una familia que tenía mucho dinero y que tenían un hija de su edad aproximadamente, lo malo era que también le habían dicho que era una pija repelente y que siempre estaba de mal humor y era borde, en definitiva, que tenía un carácter bastante fuerte.

          El hijo le pidió consejo a su padre, el padre se quedó asombrado, y le pregunto que como se le había ocurrido eso. El hijo contestó que si se casaba con ella se les acabarían todos los problemas de dinero. El hijo le pidió a su padre que por favor hablara con el padre de la muchacha ya que eran muy amigos y le organizara una cita con ella. Tras tanto insistir él hijo consiguió su objetivo.

           Tuvieron la cita y organizaron una boda, pero no una boda cualquiera una boda en las canarias en un hotel de 5 estrellas con un banquete de estrella michelín, como ya he dicho la familia de la chica eran ricos.

           Una vez celebrada la boda se fueron los dos a su cuarto del hotel, se sentaron y la muchacha se empezó a poner borde, y a pedirle recados a el chico. Al ver lo borde y mandona que era su nueva mujer decidió imponer su autoridad desde el principio, pego un grito muy fuerte, cogió la botella de vino que se estaba bebiendo y la hizo añicos contra la pared, eso mismo hizo con todo el minibar. Después le dijo a su mujer que le trajera agua, la mujer no se inmuto. entonces su marido le cogió el móvil y lo estampó en contra la pared, y la gritó que le trajera agua, la mujer siguió sin inmutarse, el chico cogió un trozo de cristal  del suelo y se lo puso en el cuello, volvió a hacer el mismo mandato, pero esta vez la mujer obedeció, calada hasta los huesos de miedo y champagne, reunió todo su valor y salió corriendo hacia fuera de la habitación, el hombre gritando lanzó el trozo de cristal hacia ella causándole una herida de unos 5 cm en el gemelo. Rápidamente la chica salió de habitación y corrió corrió mucho hasta llegar a la habitación de sus padres,m se derrumbo todo su carácter fuerte se desmoronó, se puso a llorar en los brazos de sus padre y llamaron al 016.

  El hombre fue condenado a 5 años de prisión y se le impuso una orden de alejamiento.

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